La presencia de columna vertebral es la característica que define a todos los vertebrados, y que otorga una capacidad única de movimiento, forma y función. Por lo cual, los peces con deformidades de la columna vertebral no nadan eficientemente, son menos capaces de adquirir alimento, tienen mayor riesgo de depredación por pájaros o lobos, y son más susceptibles al desequilibrio fisiológico, además de ser degradados en la planta de proceso.
Las causas de deformidades de columna vertebral son diversas, genéticas, nutricionales, ambientales (temperatura). Generalmente, estos cambios en las estructuras óseas internas ocurren mucho antes de que sean visibles externamente en la unidad de cultivo; por lo que se diagnostican tardíamente.
Las deformidades de columna vertebral pueden constituir una importante causa de problemas para la salud y economía de peces en cultivo.
Así, la radiografía constituye un método útil de diagnóstico que evaluará la condición ósea de la columna vertebral, a partir de la fase de alevín hasta el término, en la planta de proceso. Un importante control para detectar en qué momentos comienzan a generarse cambios óseos y cuáles son las posibles causas dentro de las variables del cultivo.
Esto permitirá, sin lugar a dudas, recopilar información para conocer la condición ósea de cada stock de peces, tomar decisiones en relación al manejo, validar la selección de ovas, de acuerdo a su historial óseo, e identificar lotes de riesgo.